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Alexander von Humboldt, Aimé Bonpland: „Palma de cera. Ceroxilon Andicola“, in: ders., Sämtliche Schriften digital, herausgegeben von Oliver Lubrich und Thomas Nehrlich, Universität Bern 2021. URL: <https://humboldt.unibe.ch/text/1817-Estracto_de_una-3> [abgerufen am 27.04.2024].

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Permalink:
https://humboldt.unibe.ch/text/1817-Estracto_de_una-3
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Titel Palma de cera. Ceroxilon Andicola
Jahr 1841
Ort Havanna
Nachweis
in: Memorias de la sociedad patriotica de la Habana 12 (1841), S. 395–397.
Beteiligte Aimé Bonpland
Postumer Nachdruck
Academia de ciencias de Cuba. Museo histórico de las ciencias „Carlos J. Finlay“. Serie historica no. 8. Bicentenario de Humboldt. Trabajos de Humboldt, Havanna 1969, S. 13–14.
Sprache Spanisch
Typografischer Befund Antiqua; Auszeichnung: Kursivierung.
Identifikation
Textnummer Druckausgabe: III.39
Dateiname: 1817-Estracto_de_una-3
Statistiken
Seitenanzahl: 3
Zeichenanzahl: 5546

Weitere Fassungen
Estracto de una memoria sobre la Palma de cera. (Ceroxilon andicola) (Madrid, 1817, Spanisch)
Estracto de una memoria sobre la palma de cera. (Ceroxilon Andicola) (Mexico, 1834, Spanisch)
Palma de cera. Ceroxilon Andicola (Havanna, 1841, Spanisch)
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PALMA DE CERA


Ceroxilon Andicola.

El árbol que forma el objeto de estas observaciones, no solo esnotable por su novedad, sino tambien por el lugar en que crece, laaltura á que se levanta, el producto que ofrece y las ventajas quepueden sacarse de su cultivo. Llamase palma de cera, y por estolos dos cèlebres botánicos Humboldt y Bompland la han llamado ceroxilon; de las palabras griegas keros cera, y xilon leña. La mon-taña de Quindiú, en que crece este árbol interesante, es la partemas elevada de los Andes que separa el valle de la Magdalena,del rio Cauca. La elevacion de esta planta sobre el nivel del mar,presenta un fenómeno muy notable. Los palmeros no crecen masallà de 500 toesas de altura, pues el frio de las regiones mas ele-vadas les impide acercarse al límite inferior de las nieves perpe-tuas. El palmero de Quindiú es una escepcion de esta ley cons-tante de la naturaleza. Apénas se ve en las llanuras; empieza áprosperar á la altura de 900 toesas, que es igual al de las mayoresmontañas del antiguo continente: parece pues que huye de losgrandes calores de las regiones mènos elevadas, y que se place ámas de 1,000 toesas de elevacion sobre la altura análoga á los ár-boles de su familia. Este precioso vejetal convendria perfecta-mente en la parte meridional de Europa, donde abundan otrospalmeros que exijen 17 grados de calor mas que el de que se tra-ta. Otra circunstancia muy digna de tenerse presente, es, que elpalmero de cera no existe en ninguna parte del globo, sino en laque hemos mencionado y en ella solo ocupa una estension de 15á 20 leguas. Los principales caractéreres que constituyen este nuevo gé-nero, son la espata de una sola pieza, racimos de flores femeninas,otros de masculinas con hermafroditas, todas en la misma planta.Las flores masculinas tienen extraordinariamente doce estambres, lomismo que las hermafroditas, cuyo ovario aborta siempre; elde las flores femeninas contiene una almendra. Entre las nu-merosas especies de palmeros que abundan en la América, nin-guno es mas alto que el ceroxilon andicola. Sube hasta 160 y180 pies, y sus hojas suelen tener 3 y mas toesas de largo: porconsiguiente es uno de los vejetales mas altos que se conocen. Pli- |396|nio cita una viga de 120 pies de largo que servia en el anfiteatrode Neron, y los enormes eucalyptas del cabo de Diémen no pasande 150 pies. Sus raices son fibrosas, muy numerosas y la princi-pal mas gruesa que el cuerpo del palmero. El tronco hinchado ensu altura media, es sumamente derecho, y podrá tener de diámetrodos quintos de toesa. Tiene en toda su estension anillos que re-sultan de la caida de las hojas, y los espacios comprendidos entreellos que son amarillos y tan lisos como los de la caña, se cubrende una mezcla de resina y cera que forma una costra esterior.Esta es la que los habitantes de aquel pais miran como cera pura,y de la que derretida con un tercio de sebo, hacen cirios y bujias,cuyo uso es tan agradable como variado. El químico Vauquelinha analizado este producto, y ha hallado que consta de dos terciosde resina y un tercio de una sustancia que se precipita por simisma del alcohol, y que tiene todas las demas propiedades quí-micas de la cera. La cera no es un producto nuevo en los vejetales: se encuen-tra con abundancia en los frutos de la mirica cerifera, y esta pro-duccion se emplea muy útilmente en una gran parte de la Amé-rica, como en Mompox, Sta. Fé de Bogotá y Popayan. El cero-xilon la da en mucha mayor cantidad. Otras ventajas se sacariande su cultivo. La altura de su tronco lo hace preferible al de otrosárboles de la misma especie que se emplean en conductos parael agua. Su durísima madera podria emplearse en la construccionde las casas, y sus hojas no serian ménos útiles que las del cocobutyracea con que construyen sus cabañas los indios del Orinoco. D. Luis Proust ha dicho que el polvo blanco é imperceptible quecubre las ciruelas, no es otra cosa mas que cera vejetal: tambienexiste en la misma forma en los claveles, y sin duda se hallará enotras infinitas producciones, cuando las ilumine la antorcha de laquímica. La cera eminentemente inflamable del palmero se formade un jugo vejetal, tan insípido y tan acuoso como el que se estraedel tronco del cocotero. Los diferentes productos de los palmeros merecen la aten-cion de los apasionados á las ciencias naturales. En algunos losjugos elaborados se concentran en el fruto, y se convierten en azú-car ó en emulsiones semejantes á la leche de almendras: en otraslos frutos están cubiertos de sustancias farinosas; en otros pasanal estado de aceite puro, y ofrecen un objeto interesante de espe-culacion mercantil. El palmero mauricia en que se refugian losindios guaraunos cuando se verifican las inundaciones del Ori-noco, suministra una fruta en alto grado alimenticia. Debe tambien observarse en el palmero que nos ocupa, que eljugo convertido en cera hace las funciones de la epidérmis. Losanillos ocasionados por la caida de las hojas, no son los que tra- |397|sudan la materia inflamable, esta sale de unas verdaderas cica-trices en que esta destruida la organizacion, y cuyo carbono, se-parado del hidrójeno por el contacto del oxíjeno atmosférico, que-da completamente descubierto. Así es como la naturaleza produ-ce en una sola familia de vejetales y en órganos uniformes en suestructura, las mezclas mas heterogéneas. ¡Tan varios son los ele-mentos de sus combinaciones, y tan misteriosos los juegos de susafinidades!

Humboldt.