Copia de una carta de Cumana del 24 Vendimiario, anno 8o (16 de Octubre de 1800), inserta en el Monitor o Gazeta nacional de Francia del 7 Prairial, anno 9o (27 de Mayo de 1801); traducida en el Real Estudio de Mineralogia por D. Vicente Gonzalez del Reguero. Humboldt al ciud. Fourcroy, miembro del Instituto nacional. La conquista de la Isla de Curazao por los Ingleses y americanos ha obligado al ciud. Bressot, Agente de la Republica, y al General Jeannet a reembarcar sus tropas para volver a la Guadalupe, quienes por la escasez de viveres que padecian se vieron precisados a entrar en este puerto; y aunque solo se detendran 24 horas, procurare juntar y disponer algunas cosas capaces de merecer la atencion de Vm.; y espero con fundamento que por este conducto lleguen a sus manos. Vm. conoce muy bien el objeto de mi viage, las dificultades y gastos de transporte, atravesando este vasto continente; y por lo mismo descubrira que mi empenno es mas bien el de juntar ideas que el de hacer colecciones de objetos. Una compannia de naturalistas comisionada por el gobierno, y ayudada de pintores, disecadores y colectores &c. puede y debe abrazar todo el por menor de la historia natural descriptiva; pero un particular que con bienes de una mediana fortuna emprende el viage al rededor del mundo, debe sin duda alguna proponerse objetos de mas utilidad; debe estudiar la formacion del globo y capas que lo componen; analizar la atmosfera; medir con los instrumentos mas exactos su elasticidad, humedad y temperatura, su carga electrica y magnetica; observar la influencia del clima sobre la economia animal y vegetal; y ultimamente acercar en grande o por mayor la Quimica a la Fisiologia de los seres organizados. Tal es el plan de los trabajos que me he propuesto. Pero sin perder de vista el objeto principal de este viage, conocera Vm. que dos hombres que con aficion, actividad y entusiasmo examinan un continente enteramente nuevo, pueden al mismo tiempo colectar muchos objetos dignos, y hacer observaciones circunstanciadas. En los diez y seis meses que hemos empleado en recorrer el vasto pais situado entre la Costa, el Orinoco, Rio-Negro y el de las Amazonas, mi compannero el ciud. Bonpland ha disecado (inclusas las dobles) mas de seis mil plantas: hemos hecho en su sitio natal la descripcion de mil y doscientas especies, de las quales la mayor, o a lo menos una gran parte, nos han parecido generos nuevos, no descritos hasta ahora por Aublet, Jacquin, Mutis, ni Dombey: hemos colectado algunos insectos, conchas y palos de tinte: hemos disecado cocodrilos, lamentins, monos y gymnotos electricos (cuyo fluido es todo galvanico, y no electrico): ultimamente, hemos hecho la descripcion de muchas serpientes, zorras y peces. He dibuxado muchos de estos objetos, y me atrevo a decir que si me equivoque alguna vez, no ha sido por falta de actividad, sino por mi ignorancia. Pero, amigo, !que alegria tan grande y tan completa se recibe viviendo entre riquezas de una naturaleza tan magestuosa y respetable! Ya con esto he satisfecho el mas vivo y ardiente de mis deseos: me he visto en medio de los espesos e intrincados bosques del Rio-Negro, rodeado de tigres y de cocodrilos, todo el cuerpo amoratado por las terribles picaduras de los formidables mosquitos y hormigas, sin otro alimento que agua, platanos, pescado y yuca; entre los Indios Otomaquos, que comen tierra, y en las riberas del Casiquiro (baxo el equador), donde en mas de ciento y treinta leguas no se ve persona humana; pero a pesar de todas estas situaciones tan peligrosas y expuestas jamas he pensado en volver atras, y mucho menos en abandonar mis proyectos. Es verdad que los trabajos han sido grandes; pero siempre pasageros o de corta duracion. Quando sali de Espanna habia hecho animo de pasar directamente a Mexico, de alli al Peru y a las Islas Filipinas.....; pero una fiebre maligna, que se manifesto en nuestra fragata, me obligo a quedarme en esta costa de la America meridional, en donde viendo la facilidad que habia para penetrar en el interior, emprendi dos viages, el uno a las Misiones de los Indios Chaymas de Paria, y el otro al gran pais situado al norte de las Amazonas entre Popayan y los montes de la Guayana francesa. Hemos pasado dos veces por las grandes cataratas del Orinoco y las de Atura y Maypura (lat. 5° 12' y 5° 39' long. occ. desde Paris 4d. 43' y 4° 41' 40") desde la boca del Guaviaro y riberas de Atabapo, Temi y Tuamini. He mandado conducir mi piroga por tierra hasta el Rio- Negro, mientras nosotros pasamos a pie por entre bosques de Hevea, Cinchona, Winterana canela...... He baxado por el Rio-Negro hasta S. Carlos con el fin de determinar la longitud por medio del guardatiempo de L. Berthoud, de que estoy satisfecho. Subi hasta Casiquiara, habitada por los Idapaminores, que no comen ni se mantienen de otra cosa sino de hormigas desecadas al humo. He penetrado hasta el nacimiento del Orinoco, mas alla del volcan de Duida, es decir, hasta donde la ferocidad de los Indios Guaycas y Guaribos lo permite. Volvi a baxar todo el Orinoco, llevado por la rapidez de su corriente, hasta la capital de la Guayana; cuya suma asciende a quinientas leguas corridas en veinte y seis dias (descontando los de descanso). El error de latitud (carta o mapa de D'Anville) pasa de dos grados. Bien es verdad que jamas se habia medido con instrumentos astronomicos. Mi robustez ha resistido felizmente a las fatigas de un viage de mas de mil y trescientas leguas; pero mi compannero el ciud. Bonpland casi llego a ser victima de su zelo y aficion a las ciencias: pues a nuestra vuelta le acometio una fiebre maligna acompannada de vomitos bastante peligrosos, de cuyo riesgo salio en breve con felicidad. El pais de las Amazonas se halla mas ha de doscientos annos habitado por Europeos; pero en el Orinoco y Rio-Negro solo de treinta annos a esta parte se han atrevido a formar pequennos establecimientos europeos del otro lado de las cataratas: los que hay actualmente constaran poco mas o menos de mil y ochocientos Indios; y desde el 8° de latitud hasta el equador no se ven ni hay mas blancos que seis o siete Misioneros, los quales en todo quanto ha estado de su parte nos han facilitado el viage. Desde la capital de la Guayana (Santo Tome lat. 8° 8' 24" long. 4° 25' 2") atravesamos por segunda vez el gran desierto conocido con el nombre de Elanos, y habitado solamente por bueyes y caballos salvages. Estoy formando la carta de los paises que he recorrido, y tengo la satisfaccion de ver en ella cincuenta y quatro lugares donde hice observaciones astronomicas. He observado en Caracas, Cumana y Tuy como unos doce eclipses de los satelites de Jupiter, y el de sol de 6 Brumario, anno 8o: con estos auxeilios y con el cronometro espero dar a luz una carta bastante exacta. Desde dicha capital nos embarcamos para la Havana, de donde seguiremos a Mexico. Esta es, amigo mio, la relacion de mis trabajos: se quanto interesa mi suerte no solo a Vm., sino a los sabios ciudadanos Chaptal, Vauquelin y Guiton.....; por lo qual no temo seros fastidioso. Nos hallamos casi sin comunicacion con Europa; mas con todo me he determinado a escribir a Vm. alguna vez, como igualmente a nuestros amigos los ciudadanos Vauquelin y Chaptal: os he enviado algunas experiencias sobre el ayre y sobre la causa de los miasmas; y a los ciudadanos Delambre y Lalande los extractos de mis cortas observaciones astronomicas..... ?Sera posible que nada haya llegado? Por el Consul de la Republica en Santo Tomas envie a Vm. la leche de un arbol que los Indios llaman vache: la beben los habitantes; y no solo no es dannosa, sino que al contrario es de bastante alimento: por medio del acido nitrico he conseguido hacer el caucho, y he mezclado con sosa el que he destinado para Vm., siguiendo las maxeimas y principios que Vm. ha adoprado. Por el mes de Nivose del anno 8o hemos remitido en la corbeta Filipina la coleccion de semillas destinadas para el Jardin de Plantas de Paris: supimos que habia llegado, y debe haberse entregado a los ciudadanos Jussieu y Thouin por medio del Embaxador de la Republica cerca de S. M. Catolica. Con el parlamentario que debe llegar de la Guadalupe recibira el Museo otros objetos. Por ahora creo debo cennirme a presentaros algunos productos para la analisis quimica. He procurado buscaros el Curare, celebre veneno entre los Indios del Rio-Negro, en toda su pureza, para lo qual hice expresamente un viage a la Esmeralda, a fin de ver el bejuco que da este xugo (por desgracia le encontramos sin flor), y ver fabricar esta bebida a los Indios Catarapesis y Maquiritares. En otra ocasion dare a Vm. (ya que el Agente Bressot va a marchar muy pronto) una descripcion circunstanciada; y solamente tengo que annadir sobre esto que remito el Curare en una caxa de hoja de lata con las ramas de la planta Maracuri, que produce el veneno . Este bejuco crece con escasez en las montannas graniticas de Guandja y Yumaraquini a la sombra del Theobroma cacao y del Caryocar. Quitada la epiderme, se hace una infusion en frio (se exprime primeramente el xugo; se echa agua a reposar sobre la epiderme ya medio exprimida, y despues se filtra la infusion). El licor filtrado es amarillento; se cuece y se concentra por corporacion e inspisacion hasta tomar la consistencia de una melaza: en este estado ya contiene el veneno; pero como no esta aun bastante espeso para untar las flechas, se le mezcla con el xugo glutinoso de otro arbol llamado por los Indios Kiracaguero: esta mezcla se cuece de nuevo hasta que el todo se reduce a una masa pardusca. Bien sabe Vm. que el Curare se toma interiormente como remedio estomacal, y que solo es dannoso quando se halla en contacto con la sangre, a la que desoxeida; y aunque hace pocos dias que me he puesto a trabajar sobre ello, ya he visto que descompone el ayre atmosferico; por lo qual suplico a Vm. haga nuevos ensayos para averiguar si tambien desoxeida los oxeides metalicos, y si son o no exactas las experiencias de Fontayne. Ni la caxa ni los demas objetos enunciados en esta carta han llegado hasta ahora al ciud. Fourcroy. Ademas del Curare y Maracuri envio a Vm. el Dapiche, la leche de Pindaro y la tierra de los Otomacos...... El Dapiche es un estado de la goma elastica, que tal vez no habra Vm. visto aun: la hemos descubierto en un parage donde no hay Hevea, en las lagunas de la montanna de Javita (lat. 2° 5'), famosas por las terribles serpientes Boa que mantienen. Hemos visto entre los Indios Poimisanos y Paraginis instrumentos de musica hechos de caucho, cuya materia encuentran en la tierra, segun nos dixeron los habitantes. El dapiche o zapir es una masa esponjosa blanca que se encuentra baxo las raices de dos arboles que nos han parecido de un genero nuevo, y del qual publicaremos algun dia la descripcion: llamanse Jacio y Curvana: el xugo de estos arboles es una leche muy aquosa, y una de sus enfermedades al parecer es la de destilarle por las raices: esta especie de hemorragia coagula la leche en la tierra humeda, sin contacto con el ayre libre, y destruye al arbol: os remito el mismo Dapiche, y una masa de Caucho hecha de el, con la simple operacion de exponerle o derretirle al fuego. Esta substancia y la leche de la vache estudiadas por Vm. daran mas luces sobre una materia tan curiosa para la Fisiologia. La leche de Pindaro es la leche sacada de un arbol Pindaro o un barniz blanco y natural: quando esta fresca se barnizan con ella vasos y tucumas.... se seca muy pronto, y es un barniz muy bello; pero por desgracia se pone amarillo quando se le saca en gran cantidad: asi la remito. La tierra de los Automaquos..... Esta nacion hedionda por las pinturas con que desfiguran su cuerpo, casi no comen mas que tierra gredosa durante los tres meses en que el Orinoco esta muy crecido y no se encuentran tortugas: algunos de ellos comen libra y media al dia; y aunque algunos Misioneros aseguran que la mezclan con la grasa de la cola del cocodrilo, es falso: hemos visto en las casas de los Automaquos provisiones de tierra, sin mas preparacion que tostarla y humedecerla: me ha sorprehendido el ver que pueda estar un hombre sano y robusto comiendo libra y media de tierra al dia, quando vemos el pernicioso efecto que esta produce entre nuestros ninnos: sin embargo, mis experimentos sobre las tierras y sus propiedades de descomponer el ayre quando estan humedas, me hacen sospechar que pueden ser nutritivas, quiero decir, obrar por afinidades. Se me ha venido a las manos, y por lo mismo incluyo para el Museo la caxa de tabaco de los mismos Automaquos, y la camisa que usa una nacion vecina a los Piraoas. Esta caxa no es, como Vm. vera, de las mas chicas, y se reduce a un plato, sobre el qual se pone una mezcla del fruto de una Mimosa deshecho y podrido, mezclado con sal y cal viva. El Automaquo tiene en una mano el plato, y con la otra el tubo, cuyos dos extremos entran en sus narices para respirar este tabaco tan estimulante. Este instrumento merece la atencion de la historia, pues no le usan sino los Automaquos y Omeguas, donde La-Condamine le vio en dos naciones que estan ahora a trescientas leguas de distancia la una de la otra; lo qual prueba que los Omeguas que (segun una antigua tradicion) han venido del Guabiaro, puede ser que desciendan de los Automaquos, y que la ciudad de Manoa pudo haber sido vista por Felipe de Vure entre Meta y Guabiara. Estos hechos son interesantes para saber el origen de la fabula del Dorado. La camisa que uno de mi familia ha traido durante algun tiempo es la corteza del arbol Morima, a la qual no se da ninguna preparacion; de donde Vm. inferira que en este pais las camisas crecen en los arboles. Cerca del Dorado no he visto mas curiosidades mineralogicas sino talco y un poco de titanio. Nos ha sido imposible acabar de colocar las semillas y plantas del Rio-Negro, que destinamos a los ciudadanos Thouin, Jussieu y Desfontaines, en cuya memoria me lisonjeo permanecer aun. Tenemos cosas bien raras, como nuevas especies de Befaria y nuevos generos de Palmas; todo lo qual saldra dentro de poco; y este Vm. seguro que no me olvidare del Museo; pero por desgracia ya salio el Capitan Baudin, y nosotros aun estamos aqui: muy sensible nos es, pero puede ser que le encontremos en el mar del Sur. Suplico a Vm. se sirva dar mis expresiones a los respetables miembros del Instituto nacional, como tambien a los ciudadanos Berthollet, Chaptal, Vauquelin, Guiton, Jussieu, Desfontaines, Hally, Delambre, La Place, Cubier &c. En la carta que escribi al ciudadano Delambre se me ha olvidado un eclipse, y os suplico se lo digais, y le comuniqueis esta nota. Inmersion del tercer satelite el 4 de Octubre de 1800 en Cumana; 16h 59' 36" tiempo medio. P. D. Hagame Vm. el favor de pedir a la Junta de Longitudes los Conocimientos de tiempos: llorare siempre la muerte del General Dasaix, que me estimaba. !Que perdida tan grande, no solo para la Republica, sino para toda la humanidad!